El embarazo es una de las etapas más importantes en la vida de la mujer y es lógico que cada vez más, las futuras mamás se preocupen por su físico para estar preparadas no sólo para el parto, sino también para el embarazo y posparto.
Existen muchos ejercicios para poder realizar durante las semanas de gestación pero como siempre hay que tener cuidado de cómo y cuándo se realizan.
Los ejercicios para las embarazadas deberían tener por objetivo potenciar un poco la faja abdominal, mejorar el tono de la musculatura del suelo pélvico así como también fortalecerlo y hacerlo más elástico.
No todos somos iguales, por lo tanto habrán ejercicios que estén totalmente indicados para algunas mujeres así como otros que hay que evitar.
Por ejemplo, si insistimos mucho en ejercicios para potenciar la musculatura pélvica podemos estar provocando una hipertonía de suelo pélvico, por lo que la dilatación será mucho más difícil y por lo tanto el parto, más complicado.
Antes de iniciar cualquier actividad física durante el embarazo, consulta a un profesional que te asesore y recomiende los mejores ejercicios para ti.
SÍ SE PUEDE, EL EJERCICIO EN EL EMBARAZO ES MUY IMPORTANTE, PERO TENIENDO EN CUENTA QUE LA ACTIVIDAD FÍSICA DEBE DE ESTAR ADAPTADA A ÉSTA ETAPA DE NUESTRA VIDA Y GUIADA POR UN PROFESIONAL que conozca exactamente lo que es un embarazo a nivel físico, hormonal, emocional y cómo un exceso puede afectar en todos estos pilares en una embarazada.
Antes de iniciar cualquier actividad física durante el embarazo, consulta a un profesional que te asesore y recomiende los mejores ejercicios para ti.
Pilates
¿Por qué no recomendamos el Pilates cuando hay una disfunción de Suelo Pélvico?
Como Fisioterapeutas claro que apoyamos el Pilates para tratar cualquier alteración postural, tonificar, problemas de espalda, flexibilidad, etc... pero recomendamos que siempre que sea un profesional cualificado el que dirija y asista la sesión.
El problema en Pilates para el suelo pélvico es el tipo de RESPIRACIÓN que se solicita en algunos ejercicios así como el trabajo de abdominales. Cualquier respiración que bloquee las costillas cerrando así el tórax, tendrá como consecuencia el aumento de la presión intraabdominal, el bloqueo del diafragma y debilitará el suelo pélvico empujando las vísceras hacia abajo, favoreciendo los prolapsos y las incontinencias.
Si tienes alguna disfunción del suelo pélvico y quieres hacer Pilates busca un buen profesional que modifique este tipo de respiración y evite los ejercicios que favorecen ese aumento de presión en el abdomen y por supuesto, soluciona primero esa disfunción para poder realizar en el futuro cualquier actividad física sin problemas.
Crossfit y Suelo Pélvico
Mucho cuidado con los deportes de impacto, que son muy lesivos para el suelo pélvico.
El Crossfit probablemente sea de los más lesivos que hay, pero no sólo para el suelo pélvico sino para todas las articulaciones...
Además los síntomas de lesión empiezan a dar la cara mucho antes que si practicáramos otros deportes de impacto como puede ser correr.
Con esta modalidad de ejercicios provocamos tal hiperpresión intrabdominal que nuestro cuerpo sufre y se resiente desde las primeras sesiones, la incontinencia urinaria con este deporte está a la orden del día incluso en deportistas jóvenes de menos de 30 años.
Sí que debemos hacer ejercicio, pero por favor, con cabeza y de forma progresiva. Todos aquellos que supongan un gran esfuerzo abdominal deberían ser ignorados o al menos realizarlos bajo supervisión para reducir todo lo posible la presión que se genera.
Ejercicios de Kegel, ¿son efectivos?
Los ejercicios de Kegel consisten en contraer 5 segundos la musculatura del suelo pélvico y relajarla durante 10 segundos. Repetir esa serie 10 veces y luego hacer una serie de 10 contracciones repetidas rápidas sin descanso... y volver a empezar. ¿Cuantas repeticiones? MUCHÍSIMAS. He llegado a leer 200 repeticiones diarias, pero como todo hay que saberlo hacer bien, porque hay aproximadamente un 40% de mujeres que en vez de contraer esa musculatura, empujan para defecar o la contraen a la vez que con el abdomen empujan para expulsar... ¡vaya lío si hay que hacerlo sola! ¿Lo estaré haciendo bien?
Cuando estos ejercicios están bien hechos, activan la circulación y el drenaje linfático de la pelvis, además mejoran la fuerza de aquella musculatura muy débil y, sobre todo, estimula los reflejos miostáticos y la propiocepción de esa zona del cuerpo.
Surgen cuando un ginecólogo americano llamado Arnold Kegel ideó en la década de 1940 un conjunto de ejercicios para sus pacientes con problemas de incontinencia urinaria.
Estos ejercicios tenían por objetivo aumentar la fuerza de la musculatura del suelo pélvico, así que consistían en trabajar dicha musculatura en su contracción y relajación en diferentes posturas, intentando no usar otros músculos como el abdomen o aductores.
En aquella época fue revolucionario porque se empezó a trabajar una parte del cuerpo TABÚ y desconocida en su funcionamiento para las mujeres y muchas encontraban mejoría.
Esta técnica que resultó revolucionaria en 1948, aún hoy es recomendada en algunos casos como parte de un tratamiento integral del Suelo Pélvico actualizado.
Hoy en día, profesionales como yo tenemos que agradecer a Kegel el que empezara a pensar en nuestro Suelo Pélvico y sembrara la inquietud que ha dado origen a toda una disciplina sanitaria dedicada a su rehabilitación.
Para las embarazadas es adecuada, porque mejora la circulación y el drenaje de esa pelvis que se va congestionando según pasan los meses y vamos aumentando de peso.
Además se ejercitan los reflejos miostáticos de esos músculos, tan necesarios en el expulsivo (ayuda en la deflexión de la cabeza del bebé) y mantiene a raya la incontinencia urinaria en ese estado.
Usado como único tratamiento del Suelo Pélvico resulta insuficiente y desfasado, así que aquellas mujeres que no hayan mejorado sus síntomas a pesar de haberlos hecho correctamente no deben resignarse con su problema, sino entender que desde 1948 hasta ahora la ciencia ha avanzado mucho y las consultas de fisioterapeutas especialistas como el Instituto del Suelo Pélvico le pueden ofrecer otras soluciones actualizadas y eficaces.
Si haces deporte, estés o no embarazada, sea cual sea tu edad, hazte una revisión de tu suelo pélvico, podremos asesorarte sobre que ejercicios puedes hacer y cuales deberías evitar.